17.2.05

Tebeo del mes: Reseña de 'Red Rocket 7'

Red Rocket 7 (Recerca Editorial, febrero 2005). 208 páginas. PVP: 29,95 euros

Después de unos meses de espera desde que Recerca anunciara su publicación, la edición española integral de Red Rocket 7 ya está en las librerías. La obra más personal de Mike Allred conjuga ciencia ficción y rock and roll, como una mezcla imposible entre Forrest Gump, Velvet Goldmine y Mis dobles y yo (valga la comparación cinematográfica). Aparecida originalmente en 1998, esta historia contiene algunas de las viñetas con fondos más esmerados de Allred, secundado como siempre por su esposa Laura a los colores (o cómo introducir paletas planas satisfactoriamente en el cómic de hoy en día, a excepción de esos recortes de carátulas que pululan por todo el volumen).

El argumento gira en torno al enfrentamiento entre Enfinitos y Celestonianos, dos razas procedentes de planetas distintos con intereses opuestos. Los primeros encarnan el apego a la vida terrenal y los segundos son descritos como una nueva generación de cristianos que confían en la trascendencia a otra realidad espiritual. Nótese aquí la influencia religiosa del autor, cuyo trabajo más reciente ha consistido en llevar al Noveno Arte el célebre Libro del Mormón.

En este escenario surge Red Rocket 7, uno de los seis clones del celestoniano original que aterrizó en la tierra en su escapatoria. Junto a sus hermanos (cada uno con sus propias habilidades), el álter ego de Mike Allred vivirá de primera mano los momentos clave de la historia del rock, donde desfilan con especial relevancia de The Beatles, David Bowie y Dandy Warhols, así como las legendarias estrellas que no sobrepasaron los 27 años. El guiño a lo musical se completa con el CD de The Gear, la banda lo-fi del propio dibujante, con un sonido cercano a unos Smashing Pumpkins de finales de los 80 (y producción absolutamente casera). ¡Sólo para adictos al creador!

Mención especial a la narración en flash-back surgida entre el clon número 5 y una periodista musical, que hilvanan toda la historia de una forma recurrente pero efectiva. Igualmente, Allred aprovecha la libertad que le brinda Dark Horse para incluir algunas de las viñetas más gore publicadas en los últimos años.

Se han comentado en otros foros los errores tipográficos de la introducción, a cargo de Robert Rodríguez, y en el completísimo dossier de cubiertas e ilustraciones promocionales (que por número de páginas podría figurar como el octavo número de la serie), un fallo que apenas eclipsa el logro de la editorial por sacar esta joya en nuestro mercado. Un mal menor.

Ahora sólo resta esperar a que Recerca se anime a seguir publicando material de Mike Allred, como Vertical, otro cómic donde el dibujante experimenta con los formatos, o la continuación de Madman que no pudimos disfrutar tras el cese de la serie de Norma o, por qué no, The Atomics, otra estupenda colección independiente donde los beatniks del universo Madman adquieren superpoderes.