28.9.05

Reseñas: Cuarto Mundo #1

Cuarto Mundo #1, de Jack Kirby (Planeta de Agostini, septiembre de 2005). 172 páginas. PVP: 4,95 euros.

Hace tiempo que terminé de leer el primer número del Cuarto Mundo con el que Planeta ha iniciado su colección de Clásicos DC (como el formato escogido ya ha suscitado numerosos comentarios, obviaré el asunto), sin embargo he preferido dejarlo reposar y hacer un pequeño esquema con los conceptos de esta epopeya, y de ese modo aclarar las ideas ante la macrosaga que se avecina.

El planteamiento de Jack Kirby es muy clásico. Los nuevos dioses -aquellos que surgieron tras la desaparición de las primeras divinidades- habitan dos planetas enfrentados: Nueva Génesis y Apókolips, que representan el bien y el mal. Los primeros, liderados por el patriarca Highfather, lucharán contra los planes de Darkseid, que pretende controlar las mentes de todos los seres. Para ello cuentan con Orion, un misterioso guerrero cuya destreza en la batalla hace dudar de su verdadero origen. En el primer ejemplar asistiremos a una impactante transformación de su personalidad, y sabremos que su padre es el mismísimo estratega en la sombra. Le acompaña en esta empresa el novato Lightray, un joven inexperto al que salvará en alta mar en un memorable episodio que termina con un ex combatiente de Normandía atado a un palo.

Todo comienza cuando Orion descubre que en Apókolips tienen capturados a unos terrestres. A través del boom-túnel (un pasillo interdimensional) logran escapar hasta Metrópolis (la Tierra) y allí comienza una nueva guerra de bandas: los anónimos Victor Lanza, Caludia Shane, Harvey Lockman y el detective Dave Lincoln ayudarán a O'Ryan (en inglés suena muy parecido a Orion) a acabar con Intergang, la banda a la que Darkseid ha confiado una bomba.

Durante la trama hará acto de presencia Metrón, un dios inteligente ávido de conocimiento cuya silla Mobius le permite viajar a través del tiempo y el espacio. De dudosa moral, facilitó a los habitantes de Apókolips el boom-túnel cuando aún gobernaba Heggra (la madre de Darkseid). Asimismo, irrumpe en escena El Corredor Negro, un emisario de la muerte que se encarna en el veterano de Vietnam Willy Walker. En la pelea, Orion se topará también con las mutaciones orgánicas de Los Seis Profundos: Slig, Joffar, Shaligo, Trok, Gole y Pyron; así como con el poderoso Kalibak y con Desaad, el inventor y mano derecha de Darkseid. Otros personajes que se presentan veladamente en este volumen son Tigra (la madre de Orion) y Steppenwolf, el ministro del terror en Apókolips en la juventud de Darkseid.

Kirby utiliza pequeños entremeses para completar el mosaico del Cuarto Mundo. De este modo nos acercaremos al primer desencuentro entre Nueva Génesis y Apokolips, esta vez protagonizado por Izaya (que al final del tomo se revelará como el Highfather), que desemboca en su insumisión ante el cariz que estaba adquiriendo el duelo. De ahí surgirá La Fuente, el oráculo que indica el camino a los nuevos dioses. Pero los pobladores del planeta del bien se sirven igualmente de la industria tecnoactiva, y de la astro fuerza y la caja madre de Orion para combatir el mal.