1.9.06

Reseñas: Les Llamaban Los Defensores

Los Defensores, de Giffen, DeMatteis y Maguire (Panini Comics, agosto 2006). 120 páginas. PVP: 10,50 euros.

Giffen, DeMatteis y Maguire no suelen reunirse muy a menudo, aunque no hacen más que sumar éxitos tras el cierre de su celebérrima parodia de la Liga de la Justicia. En esta ocasión retoman uno de los grupos más longevos e insólitos de Marvel: Los Defensores. En esta serie limitada, el Dr. Extraño efectuará el reclutamiento de miembros, pero por desgracia tiene uno de los papeles más planos de la historia. Sus discursos no son nada al lado del cascarrabias de Namor, que llega a hacerse antipático durante el desarrollo de la trama. Por el contrario, Hulk y Estela Plateada ofrecerán su cara más simpática: el primero como esclavo sexual de Umar y el segundo como indeciso poeta adoptado por los surfistas.

Uno de los puntos flacos de este volumen es el argumento. Estamos hartos de villanos con ganas de conquistar el mundo, aunque los autores empleen el recurso a modo de chiste. Y Dormammu, en esta ocasión, se hace mucho más pesado y menos gracioso que Manga Khan. Su deseo de alcanzar la eternidad y crear un universo a su imagen se prolonga a lo largo de cinco números sólo para brindarnos una versión siniestra de superhéroes ilustres como Spiderman, Lobezno, Daredevil, Thor o el Capitán América. Por otro lado, Chris Sotomayor se encarga de emborronar los dibujos de Maguire con sus brillos y difuminados, aunque la estrella de la expresión facial se marca un Submariner que recuerda a Vegeta (y todos sabéis a qué viñeta me refiero).

Con todo, Panini presenta un tomo muy destacable dado que, en el fondo, la fórmula de Giffen y DeMatteis sigue funcionando, y las carcajadas surgen de forma involuntaria. Sin embargo, se aprecia que el humor de los autores encaja mejor con grupos numerosos como la Liga, pues el reto de refundar a Los Defensores, con sólo cuatro personajes –y uno haciendo guardia en la playa por si hay moros en la costa-, se vuelve lineal y, por momentos, aburrido.