Psiconautas o la evasión del mundo gris

Psiconautas es la primera obra en solitario de Alberto Vázquez para una editorial de tiradas considerables como Astiberri. En ella recupera aquellos animalillos adictos a las drogas de Fanzine Enfermo, bajo cuya inocente apariencia se esconde la realidad sórdida de un páramo habitado por criaturas enfermizas. Las páginas están llenas de personajes inolvidables, como Bird-Boy, la ratita Dinki, su hermano Jonathan y el despertador Reloggio.

Los dos primeros, protagonistas de la trama, encarnan las inseguridades y transformaciones del adolescente, con sus vuelos en picado y las discusiones con los padres a la hora de comer, además de experimentar el camino de la corrupción en paralelo. Otras mascotas que desfilan por este volumen son el marinero traficante y su loro enjaulado, los sabuesos de policía que acechan al chico pájaro, así como los temibles y sanguinarios niños pobres. Frente al mundo gris de los adultos, estos jóvenes optan por la evasión y las alucinaciones en forma de ave, para luego intentar emanciparse gracias a la ayuda de un pato hinchable.

Para los más desconfiados, aclarar que todo el material del libro es inédito, dado que el autor redibujó entera la única escena ya publicada (la del Niño Jesús que llora sangre). Vázquez, con un estilo inconfundible, nos brinda una historia que aúna hermosos paisajes de trazo oriental y humor negro, sorprendiendo al lector con un final épico nada predecible.