10.6.08

Reseñas: Barsowia #11

Barsowia #11, de varios autores (Polaqia, mayo de 2008). 102 páginas. Blanco y negro. PVP: 5 euros.

En esta entrega, los autores de Polaqia parecen más interesados en la historieta con mensaje, asumiendo su papel de dibujantes como una vocación que supone cierto grado de compromiso social. Así nos topamos con referencias a la falsedad de los políticos, el drama de los pescadores, ciencia-ficción con trasfondo ecologista (el futuro es casi siempre sinónimo de inhabitabilidad), la manipulación científica, el paso del tiempo y los cambios que provoca, la inquietud adolescente, el vox populi, ciertos detalles de nuestra historia más reciente y la muerte como elemento omnipresente en casi todas las colaboraciones. Además hay alusiones a la cábala, viñetas humorísticas, aventuras de romanos y situaciones surrealistas.

Paulo y Susa Monteiro, con un trazo similar, sobresalen por su mezcla de poesía y tragedia rural. Las ocurrencias de Mario Feal sirven para restar trascendencia al conjunto, mientras Ana Galvañ juega con las expectativas del lector en “La leyenda de Jimmy Rowland” –puede pasar cualquier cosa con dos jóvenes en una barca—. Por su parte, Luis Bustos recuerda la famosa anécdota de las uvas de 2005 con una destreza envidiable. Kike Benlloch continúa aliándose con los artistas más llamativos y retrata a nuestros héroes anónimos (junto al imprescindible Diego Blanco), o bien presenta una planificación espectacular, propia de Alan Moore, en “Radio Miedo” –cuyo núcleo es de naturaleza silenciosa y absurda—.

Esteban Hernández explica por qué no debemos reprimir los estornudos, al tiempo que Bernal, Michael Bonfiglio y los hermanos Covelo rebajan el tono de la revista con saludables raciones cómicas. De la mano de David Rubín, Malota salta aquí de la ilustración simétrica al tebeo a lápiz, para demostrar que su reino también es de este mundo (entre los dos autores existe una química muy especial). Los esqueletos de Manel Cráneo rememoran aquéllos que pintaba Miguel B. Núñez. José Domingo –del que muy pronto podremos disfrutar Cuimhne, de la mano de Siurell— retoma su personaje de Euclides Mortem y nos brinda un trabajo que sigue la estela de Baker y Giménez.

Brais Rodríguez, fiel a su hermetismo, propone 40 viñetas sobre hombres lobo y ninjas. Luego está el exquisito savoir faire de Emma Ríos y Sagar Forniés. Xurxo Peralta, con sus rostros parlantes, se asemeja a las peroratas de American Splendor. El número incluye otro episodio del culebrón futurista “El jardín atómico” de Álvaro López. David Soares y Richard Câmara, en “Rey Arenque”, ofrecen un relato casi infinito lleno de casualidades, cifras que se repiten y la mitología popular. La mano nerviosa de Miquel Rof apuesta por entornos submarinos y Luis Sendón insiste con sus calaveras y sus máscaras de gas.

Mención aparte para la fantástica cubierta de Roque Romero. Ojalá no tarden mucho en sacar el siguiente volumen, pues éste ha sido magnífico, tanto en contenido (generoso) como en presentación. Estos autores merecen una divulgación mayor… ¿Alguien habló de traducir Barsowia al español?