30.6.09

Suéter, de Esteban Hernández

Suéter, de Esteban Hernández (Planeta de Agostini, junio de 2009). 96 páginas. Color. PVP: 11,95 euros.

La obra más reciente de Esteban Hernández supone un salto cualitativo en su carrera. No sólo se trata de su primer álbum en color, sino del de mayor extensión y el mejor hilvanado de todos. Narrado en forma de flashbak con cierto tono teatral, "Suéter" posee unos personajes bien perfilados: Lolo el traficante, el revisor, Alexis / La Muerte y el protagonista. En torno a una escena central desarrollada en el metro, el autor ahonda en la incomunicación (ojo a esas onomatopeyas imposibles), las drogas y el despertar de las patologías. Y lo que empezó como la historieta de un jersey con poderes, de pronto contiene dos grandes preguntas a las que ofrecerá sublimes respuestas. ¡Atentos a los meticulosos diseños de interior!

29.6.09

Super Spy, de Matt Kindt

Super Spy, de Matt Kindt (Norma Editorial, enero de 2009). 336 páginas. Color y bitono. PVP: 24 euros.

La última propuesta de Matt Kindt viene envuelta en forma de preciosista y avejentado manual de espías. Dos órdenes de lectura posibles y una treintena de historietas interconectadas entre sí que sumergerán al lector en una turbulenta Segunda Guerra Mundial, rodeado de agentes, códigos y navajazos en el cuello. El plantel de personajes recurrentes y los distintos enfoques gráficos del autor conviven con dos maneras de asumir una profesión al límite: desde el lado sentimental o a partir de la entrega absoluta a la causa. En medio del puzzle aparecen hipertextos como la radionovela "Susurro", el cómic realizado desde el frente "Green Comet", los cuentos infantiles de "Polly Perigrine" o las referencias a "Las mil y una noches". Hasta el modo de tender la ropa puede ser usado para comunicarse en sistema morse. El peculiar trazo desproporcionado de Kindt parece penetrar directamente en el subconsciente. En las sombras del conflicto, el dibujante se centra en la viudas negras y los héroes anónimos, cuyo destino suele ser la muerte o, en el mejor de los casos, el exilio. Además, la inclusión de elementos como facturas o postales nos facilita la calificación de "el Ulises de los cómics de espías". "Super Spy" es inteligente y apasionante, no sé por qué he esperado tanto a leerlo.

15.6.09

Odio #3 y #4

Odio #3 y #4, de Peter Bagge (La Cúpula, diciembre de 2008/mayo de 2009). 124/132 páginas Color. PVP: 18 euros.

Comienzan las aventuras en color de Buddy Bradley, un icono underground que se vuelve asequible. Para ello, Peter Bagge se alía con Jim Blanchard (y La Cúpula, pese a bajar la calidad del papel, sube el precio). El autor de "Mundo Idiota" divide las historietas en escenas de pocas páginas, con un prodigioso dominio de la expresividad y la narrativa que cautiva al lector de cabo a rabo. Si "Odio" ha alcanzado cotas de popularidad impensables es porque se trata del slice of life más divertido del mundo, y pocos dibujantes son capaces de transmitir la psicología de sus personajes igual de bien. Dentro hallamos perfiles y situaciones reconocibles, lo cotidiano llevado al límite. Estos dos volúmenes comprenden el retorno del protagonista a la casa de sus padres, su incursión en los negocios con Jay a cargo de una tienda de coleccionismo y un par de acontecimientos familiares / sentimentales de gran trascendencia. El antihéroe de la camisa amarilla --¿he comentado alguna vez su parecido con Lucky Luke?-- se compra un monstruo sobre ruedas para sobrellevar la carga de un hermano expulsado de la Marina, unos sobrinos inaguantables y los cambios de humor de Lisa.

10.6.09

Dos Veces Breve #19: Especial Cuadros

Dos Veces Breve #19: Especial Cuadros, de varios autores (Ariadna Editorial, junio de 2009). 60 páginas. Color. PVP: 5,95 euros.

El reto de inspirarse en un cuadro que proponía José V. Galadí para su más reciente 2VB (¡doble ración en el Salón del Cómic!) ha propiciado historietas variopintas. Juan Berrio apuesta por la autobiografía y el proceso de documentación con generosos collages. Santiago García y Javier Olivares, a propósito de "El Coloso" de Goya, hablan de las autorías cuestionadas, mientras Brais Rodriguez --por fin a todo color-- amansa a las fieras con un relato exótico y cíclico. Ana Galvañ nos adentra en la charla íntima de los figurantes de "El Balcón" de Monet, con ese lenguaje tan pedante de las películas de época. Curiosamente, Raule, Sagar Forniés, Antonio de Egipto, Andrés G. Leiva y Pilar Mahedero se fijan en "Caminante ante un mar de niebla" de Friedrich con distintos resultados: uno más "El Gran Lebowski" y otro cercano a Poe. Fermín Solís, cada vez más cómodo en su nuevo registro desenfadado, recupera al queridísimo Martín Mostaza para hablarnos de la carcoma y contarnos leyendas indias en un relato nostálgico muy bien construido. Bajo un prisma cómico, Oriol Jardí se fija en Toulouse Lautrec, al tiempo que Álvaro Ortiz se acuerda del cuadro favorito de Hitler. Olga Carmona prefiere narrar una historia sentimental a partir de la obra de Bacon. Asimismo, Arandojo y Ed, con un trazo ágil similar al de Blain, construyen una tormentosa versión de Caperucita. Cierran la revista la galería de retratos gatunos de Jacobo Fernández y una escena fatalista inspirada en El Bosco a cargo de Rafa Infantes.

Adobo #3

Adobo #3, de varios autores (mayo de 2009). 44 páginas. B/N. PVP: 2,5 euros.

Este número de Adobo (¿homenaje a "Algo pasa con Mary" en la portada?) viene acompañado de una nueva ración de chistes hirientes y sal gorda. La fuente de inspiración de sus autores sigue siendo la actualidad más escabrosa, así que no será extraño ver a Miguelito "El Shuli" haciendo su monólogo sobre Marta del Castillo tras el cristal de la prisión. Mientras flojean las secciones fijas, vuelven a sobresalir --por encontrar un lenguaje propio a partir de influencias muy concretas y por resultar dolorosamente graciosos-- Molg H. y Nacho García (cuyo "No hay tu tía" rememora el "Guou Llea" de Jorge Parras). Néstor F. ahonda en los humores internos, relega a Valentino a una viñeta y se asemeja en estructuras a Brais Rodríguez en esa historieta con pixelados. Mientras, Nathan persiste en el foto-cómic y el patetismo de sus personajes y El Otro Samu pone toda la carne en el asador con ese tablero dedicado a Disney. El encarte --un valor seguro del fanzine-- está dedicado aquí al mundo árabe, con la consabidas revisiones bruguerianas y ciertas dosis de costumbrismo musulmán. Para cerrar... ¡Una contraportada visionaria!

9.6.09

Macanudo #5

Macanudo #5, de Liniers (Ediciones de la Flor, 2008). 96 páginas. Color. PVP: 8,30 euros.

Liniers no pone límites a su tira para La Nación. Sólo así se explica que siga sorprendiéndonos tras cada entrega. Y eso garantiza una vida longeva para "Macanudo". El autor argentino decora ahora sus viñetas con membretes multicolores, presenta nuevas secciones como "Conceptual incomprensible", "Origami Boy" o "José Luis el Infeliz" e incluye referencias a nombres tan dispares como Peyo, Rimbaud o Neruda. Igual de gratificante resulta toparse con sus personajes más conocidos y comprobar que siguen gozando de buena salud (aunque con el paso de los años hemos descubierto que el Hombre Misterioso representa la muerte), que encontrarse con criaturas anónimas que a veces nos deparan escenas inolvidables --apuntemos dos: la del oficinista soñador que aparece reproducida en la contracubierta y el agente/poeta que pone nombres a las operaciones policiales--. Además, hay un homenaje a Edward Gorey titulado "El inquilino". El prólogo lo firma esta vez Andrés Calamaro, para quien Liniers ilustró "La lengua popular".

Space Dog, de Dorgathen

Space Dog, de Hendrik Dorgathen (Dibbuks, mayo de 2009). 64 páginas. Color. PVP: 6 euros.

Dibbuks se apunta otra coedición internacional, que nos permite disfrutar a buen precio de la novela gráfica sin palabras "Space Dog". En ella, Dorgathen da rienda suelta a su estilo pop (¿no os recuerda a Keith Haring?), tan minimalista como detallista, tan colorido como expresivo, llenando las páginas de acción trepidante y bocadillos iconográficos. El protagonista es un perro de granja que viaja a la ciudad, donde será la mascota de un músico negro, para más tarde ser abducido por unos extraterrestres. A la vuelta se revela como un animal parlante capaz de caminar sobre dos patas, lo cual lo convierte en una celebridad. Una fábula disney que invita a la relectura y que habla de las oportunidades que presenta la vida y la prevalencia de los sentimientos frente al éxito.

3.6.09

Barsowia #13

Barsowia #13, de varios autores (Polaqia, mayo de 2009). 108 páginas. B/N. 6 euros.

Uno de los privilegios de leer Barsowia es acercarse a los experimentos como guionistas de consagrados dibujantes de la talla de Brais Rodriguez o David Rubín. El primero comparte con Ana Santiso una tragedia rural --cerdo deja cojo a un niño-- sobre el sacrificio y los estigmas; mientras que el segundo, aliado aquí a José Domingo, demuestra sus facultades en el género de la mitología ilustrada, a la altura de Javier Olivares. Los esqueletos, leit motiv casi de esta publicación, están representados en este número de la mano de Michael Bonfiglio y Manel Cráneo (este último muy en la línea de Miguel B. Núñez, con un planteamiento tan llamativo como la canina picoleta) ofrecen humor y surrealismo a partes iguales. Jorge Taboada encarna a la perfección el emblema de Polaqia, o al menos su capacidad para aunar tradición y modernidad en sus páginas. Su relato, entre bucólico y futurista, recuerda a los trabajos iniciales del citado Brais. Frank Arbelo, de trazo expresivo y agradable, adapta un cuento de ciencia-ficción con final interrogante, que materializa el dilema del "artista absorbido por su obra". Dustin Harbin narra sus sueños con poderosa imaginería freudiana y buenos chistes. Fidel Martínez prefiere reivindicar la historia para impedir que se olvide, trasladándonos a tiempos del holocausto judío con un estilo desgarrador. Kike Benlloch y Hugo Covelo --que más adelante entrega una hoja de publicidad muy divertida sobre rayos gamma-- ponen la oreja y describen una conversación cotidiana. Kosta se muestra minimalista como nunca y firma un espléndido y conceptual "Choiva". Miquel Rof, uno de los autores menos oscuros de la revista, vuelve a engullirnos con esos pasajes fantásticos cercanos al sueño. Se repite, esta vez con las planchas ordenadas, "A caixa vermelha" de Valverde y Câmara, con tono de presagio urbano. Quizá destinada a la desaparecida "A prueba de balas", Roque Romero pone en práctica nuevas y retorcidas metamorfosis. Sergio Covelo se mantiene en el peplum con las degustables peleas de Taurus, un gladiador con guiños a Futurama que incluye tiras cómicas a pie de página y un planteamiento morale nada frívolo. Diego Blanco economiza hasta parecerse a Porcellino, mientras Ziritt se fija en Mad Max. Por su parte, Álvaro López (encargado de la cubierta), finiquita su "Habitación 13" con una explosión de gas y cierto aire cómico. Sendón y Serrano continúan las aventuras de Enzo con referencias a Lovecraft y "La historia interminable". Otra historieta por entregas es la que construyen Duarte y Penalta, un thriller oriental de época. Y por último un Bernal breve, gracioso y acertado.

1.6.09

El corazón de los árboles

El corazón de los árboles, de Miguel B. Núñez (Polaqia, mayo de 2009). 80 páginas. Blanco y negro. 12 euros.

Los árboles son testigos mudos de todo cuanto ocurre en el bosque. En su corazón guardan secretos inconfesables y crímenes sin resolver. Pese a estar en segundo plano, podrían ser el hilo conductor de la docena de historietas de Miguel B. Núñez que ahora recopila Polaqia en su colección Rompehielos, en su mayoría aparecidas en Nosotros somos los muertos. En ellas se describen rituales a sangre fría y hace acto de presencia su querida Muerte. También se habla de poder y patrullas vecinales, de los hombres bondadosos que siempre escapan mal. Y aunque sus argumentos contienen dilemas filosóficos y teorías conspiranoicas, el autor es capaz de introducir de manera ejemplar un divertidísimo humor sexual. Asimismo, persiste la fijación por el nacionalsocialismo y se aprecian guiños orientalistas ("El emperador y el pez") y cambios de registro muy acertados ("Cazando tigres" y "¡Congélate!"). La asociación gallega de BD hace justicia con "El corazón de los árboles", pues ya era hora de reunir la obra dispersa de este fundador de Recto --los otros dos ya disfrutan de sus compilaciones Mondadori--. El volumen incluye un prólogo de Paco Alcázar y comentarios del autor sobre cada episodio.